Un estudiante de Inglaterra, Bishu Clow, inventó un "mini refrigerador" portátil para almacenar drogas, resolviendo así el problema de muchas personas que dependen de ellas. Ahora, con la ayuda de un dispositivo portátil de este tipo, pueden viajar con seguridad y no preocuparse por el hecho de que los medicamentos vitales se deteriorarán en el camino y quedarán inutilizables.
Bisha se inspiró en su novia para crear un refrigerador portátil. El hecho es que los médicos de la niña le diagnosticaron esclerosis múltiple y muchos medicamentos que tuvo que tomar durante el día necesitaban ciertas condiciones de almacenamiento. Esto creó grandes inconvenientes durante los viajes y limitó su duración. Luego, el estudiante decidió crear un refrigerador portátil.
Chill es una bolsa flexible en la que el sistema de enfriamiento mantiene una temperatura constante de 2 a 8 ° C, lo que le permite almacenar casi cualquier medicamento. El dispositivo funciona con la batería incorporada, cuya carga es suficiente para varias horas de funcionamiento continuo.
Sin esperarlo, Bish ayudó no solo a su novia, sino también a muchas personas que necesitan medicamentos constantes para ser más libres y no limitarse en viajes largos.